Este anuncio de Lipograsil va dirigido exclusivamente a las mujeres, se vé que sólo nosotras tenemos la presión por alcanzar los esteriotipos de feminidad y belleza de una talla 34, los hombres, por lo visto, no tienen esta presión.
En el anuncio para despertar nuestro interés y que tomemos consciencia de lo fuertes y valientes que somos y que confiemos en que vamos a ser capaces de conseguir lo que nos propongamos, vamos viendo imágenes de diferentes mujeres en diferentes situaciones cotidianas por ejemplo una mujer que está cambiando el pañal a un bebé, otra consigue abrir una puerta cargada con un montón de bolsas de la compra, otra está ayudando a resolver los deberes del cole de su hijo; otra está depilándose (curiosamente no tiene ni un pelo) y con cara de dolor; la siguiente está cerrando una maleta llena hasta arriba seguramente de modelitos de todo tipo para estar perfecta sea la hora que sea y haga el clima que haga… también aparece una mujer dando a luz y gritando mucho.
Después de mostrar todas estas hazañas que nos convierten en heroínas, nos preguntan:¿cómo no vas a poder con esos kilos de más? Para ello, nos ofrecen un producto que nos ayudará a conseguirlo.
En los anuncios propuestos para esta reflexión queda claro que en la publicidad actual, el cuerpo de la mujer sigue siendo un reclamo, convirtiéndose en un objeto para captar la atención de la persona que va a consumir, los estereotipos de género siguen estando plenamente arraigados y el mal gusto lamentablemente, impera en muchísimas campañas.
El Arca de Noe 